Un raso de la Policía Nacional y un civil
murieron tras enfrentarse en una discusión por una mujer que trabaja en
el negocio de expendio de bebidas alcohólicas, donde compartían con
otras personas en el sector La Jina Hueca, de la sección Rincón, de
este municipio.
Las víctimas fueron identificadas como Jesús
Estévez, un agente de la Policía de 22 años de edad, y el civil Junior
Manuel Santos García, de 23. Unas seis personas resultaron heridas,
ninguna de ellas de gravedad.
Santo García residía en La Jina Hueca, y el policía en un paraje de San Francisco de Macorís.
Según
testigos, el incidente se produjo en un negocio que opera en una
estación de combustible, bien famoso en la zona, frecuentado por muchas
mujeres.
La joven por la que se habrían matado el policía y el civil tiene 15 años de edad.
La
Dirección Cibao Central de la Policía confirmó el hecho, pero su
versión difiere a la de testigos que han hablado con periodistas de este
diario.
Testigos oculares dicen que el policía bailó con la
jovencita y lo mismo habría hecho el civil, dando lugar a una discusión
entre ambos.
Asimismo, expresan que el agente, tras herir al
civil, huyó del lugar, pero fue perseguido por una multitud que al darle
alcance lo mató a pedradas, cuchilladas y tiros. Las autoridades no han
confirmado el linchamiento.
Preocupación
La persecución, linchamientos y torturas por parte de ciudadanos dominicanos en contra de supuestos o reales delincuentes sorprendidos en “plenas acciones delictivas” están a la orden del día en esta ciudad.
La persecución, linchamientos y torturas por parte de ciudadanos dominicanos en contra de supuestos o reales delincuentes sorprendidos en “plenas acciones delictivas” están a la orden del día en esta ciudad.
Esta situación preocupa al ministerio público, a los organismos de derechos humanos y a otros sectores sociales.
Dos
adolescentes de 13 y 16 años, el primero de ellos huérfano, se debaten
entre la vida y la muerte en un centro privado de aquí luego de ser
golpeados con palos y sufrir heridas de armas blancas al ser
sorprendidos por desconocidos el jueves en una finca cuando recogían
mangos para mitigar el hambre.
En el sector Cerros de Papatín, al
suroeste de la ciudad, dos jóvenes de 16 y 17 años fueron atrapados y
golpeados por comunitarios que los acusaron de asaltar estudiantes,
obreros y mujeres en horas de la noche. Uno de ellos, de acuerdo con los
testigos, perdió una oreja.